sábado, 16 de febrero de 2008

Impresiones: Córdoba


El viaje desde Salta hasta el pueblo de Salsacate, ubicado en el noroeste de la provincia de Córdoba, demoró unas 12 horas en auto. A lo largo de este viaje atravezamos la selvática provincia de Catamarca, la pobre provincia de La Rioja, y obviamente, la antigua Tucumán, con una refrescante temperatura: 30° en Enero es una bendición para esta zona del país.


Una vez en Salsacate, región bendecida por el Río Jaime, la vida se transforma, en especial para aquellos que nacimos en la ciudad. Perdida en el medio de la sierra, en el pueblo se respira un aire limpio, la gente te trata con amabilidad y existe un ambiente un poco inocente. Nada de picardías salvo para los chistes, una excelencia en traslasierra.



Rio Jaime o Rio Salsacate



Las diferencias



Pese a la pobreza, aquí no hay mucha delincuencia. Tampoco problemas alimentarios: todos comen. La principal actividad de los pobladores es el cultivo de maiz. Las escuelas, pese al escaso número de alumnos, mantienen una enseñanza digna. En Salsacate, la especialización en la secundaria es la minería. Esto se debe a que en la zona existe una gran cantidad de volcanes en extinción, donde ya se ha comprobado la existencia de metales preciosos. Hace un par de años se fundó el primer y único "cyber", y hará menos de cinco años que la televisión satelital invadió los hogares(la tele por cable no es rentable). Las plazas son seguras y no necesitaron cercarlas con ninguna reja. Hay una sola comisaría, donde generalmente se encuentran aquellos que, luego de duelo por algunas copas de más, fueron capturados por la policía. Hay dos heladerías, una sala de videojuegos(que tiene como máxima atracción el daytona y el Mortal Kombat I), una veterinaria de campo, tres "restaurants", un boliche y poco más.




El espacio público




En mi opinión, la diferencia mayor es la apropiación por parte de los ciudadanos del espacio público. Lejos de la vida encerrados en sus propios hogares, todos-desde los más chicos a los más grandes- disfrutan de pasar sus horas en la calle, en el río, en la cancha municipal de fútbol o en la montaña. Nada de refugiarse del exterior: en Salsacate todos viven comunicados, pero no de la manera que la entiende el desarrollo del capital, más bien de la forma inversa. Es a través del diálogo, del ocio, de la solidaridad y de conocer al otro(fenómeno perdido hace tiempo en las ciudades) como el pueblo reafirma y transforma soberanamente su cultura nativa.
Salsacate es para mí un ejemplo en miniatura de lo que pretendo para la ciudad. Recuperar la educación, el espacio público y alimentación son derechos irrenunciables. El mayor impedimento para esto es nuestro carácter de dependientes, fruto de la relación de subordinación que nos une dentro del sistema económico global.

Cerro Poca, volcán extinto, foto sacada por Anibal Prina-Silvia Di Liscia

1 comentario:

Edukadores dijo...

Nunca mejor explicado...
La pureza del pueblo sobrepasa lo natural, pasa por lo espiritual y se refleja en lo humano.

saludos, no olvides de publicitarme:

rebelion-en-la-granja.blogspot.com

:) au revoir!